Fallece uno de los médicos afectados por el arenavirus

LA PAZ . El médico Gustavo Vidales falleció ayer a las 8:15, debido a disfunción orgánica múltiple vinculada a la infección con el arenavirus. Marco Ortiz, el otro médico contagiado con arenavirus, lucha por su vida en terapia intensiva.

El médico Gustavo Vidales, uno de los infectados con el arenavirus, falleció la mañana de ayer, luego de permanecer en terapia intensiva en el Hospital Obrero de la ciudad de La Paz.

La ministra de Salud, Gabriela Montaño, informó que el deceso se produjo a las 8:15 por una disfunción orgánica múltiple vinculada a la infección con el arenavirus. Expresó solidaridad con los hijos, esposa, padre y hermanas del doctor Vidales.

Montaño aseveró que no se escatimaron recursos para intentar salvar la vida del médico. Aseveró que se le dio el tratamiento como se podría haber proporcionado en cualquier lugar del mundo.

La Ministra indicó que, por ejemplo, se importó un antiviral para tratar al médico y se puso a disposición a expertos internacionales.
El gastroenterólogo era uno de los dos médicos infectados. El otro, Marco Ortiz, se encuentra internado en la Caja Petrolera de Salud en terapia intensiva.

Los médicos se habrían infectado por el tratamiento que brindaron a la internista Ximena Cuéllar, quien también falleció luego que se le transmitió el virus presuntamente al tratar a un cosechadora de Caranavi. 

Tras confirmar el fallecimiento del médico Gustavo Vidales a causa de un tipo de arenavirus, el presidente del Colegio  Médico de La Paz, Luis Larrea, exigió condiciones seguras para el ejercicio de la profesión médica en Bolivia e incluso mencionó la posibilidad del cierre de hospitales.
“Este sistema de salud no tiene las condiciones necesarias para el ejercicio de la profesión y si a partir de la fecha se tienen que ir cerrando hospitales, pues vamos a hacer que se cierren hospitales”, advirtió Larrea.

Para el directivo de los galenos paceños, esta medida se tomaría en razón de que “la población tampoco puede estar expuesta a enfermedades que se dicen que están controladas y ni se conoce el diagnóstico”.

Larrea exhortó también a las primeras autoridades de salud a “leer” qué tipo de medicamento deben traer del extranjero, atribuyendo fallas en el tratamiento administrado a los médicos convalecientes.