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Falta de consenso obliga a congelar el decreto de exportación de soya

  02 de febrero de 2018

El Gobierno central se comprometió a suspender la promulgación del decreto supremo que libera la exportación de soya durante el primer semestre de 2018, ante la falta de consenso entre industrias aceiteras y el sector agropecuario para establecer los precios de la oleaginosa para el mercado interno.

El presidente de la Asociación Nacional de Avicultores (ANA), Ricardo Alandia, explicó que mientras no haya un consenso entre “privados” no se promulgará el decreto supremo. Anteriormente, el presidente Evo Morales explicó que para autorizarse la exportación los sectores agropecuarios del país deberían llegar a un acuerdo y fijar el precio de la soya y sus derivados para el consumo interno.

“Una de las condiciones era que nos pongamos de acuerdo entre privados, si en estos seis meses llegamos a un consenso me imagino que saldrá el decreto, aunque yo no puedo decir lo que hará el Gobierno”, agregó Alandia.

Al respecto, el presidente de la Cámara Agropecuaria de Cochabamba (CAC), Jhasmany Medrano, confirmó las declaraciones de Alandia y detalló que en la reunión que sostuvieron con el presidente Evo Morales, el pasado 26 de enero, garantizó que el decreto supremo no se promulgará en el primer semestre de este año ante el conflicto desatado entre los sectores implicados.

“Nuestra posición es clara, vamos a aceptar (la promulgación del decreto supremo) siempre y cuando se garantice el abastecimiento interno del país (…), valorando también que se debe tener precios estables para los productores a nivel nacional”, añadió.

Además, Medrano lamentó que las diferencias de opiniones entre representantes de las cámaras agropecuarias del oriente y occidentes sean “muy grandes” y descartó que se llegue a un acuerdo entre los sectores.

“La intención era hacer aprobar esta libre exportación el 18 de enero, pero con la marcha del agro de Cochabamba se frenó”, explicó.

Por su parte, el presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), Freddy Suárez, explicó que la liberación de las exportaciones no busca beneficiar a un sector y perjudicar al otro, sino llegar a un consenso en donde ambas partes queden satisfechas.

“Yo pienso que el diálogo no se ha roto, se va a seguir analizando el tema en mesas de trabajo (…), pedimos la libre exportación para que el productor se anime a invertir y crecer”, agregó Suárez.

“La propuesta de la CAO es liberar la exportación (del grano de soya), pero abasteciendo primero el mercado interno y de esa manera exportar los excedentes”, dijo.

Finalmente, Suárez consideró que ante la falta de consenso para liberar las exportaciones de la oleaginosa,  se debe proceder a exportar el excedente generado. Se estima que Bolivia consume al año el 30 por ciento de soya producida en el país.

Por su parte, el ministro de Desarrollo Rural y Tierras, César Cocarico, al ser consultado sobre ese tema sólo atinó a decir que se continuará consensuando con el sector de los productores del oriente para avanzar en el decreto supremo.

847 millones de dólares al año podría generar la exportación de los excedentes de soya, según estimaron los productores del sector

CRONOLOGÍA

15 De enero: Estado de emergencia
La CAC se declaró en estado de emergencia debido al anunciado decreto supremo de libre exportación de soya.

18 de enero: Movilización del agro
Al menos 15 mil productores se movilizaron pidiendo la suspensión del decreto. Se estableció la banda de precios para el grano de soya.

23 de enero: Reunión nacional
Industriales y el agro no llegaron a un acuerdo para fijar precios de los derivados de la soya.







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